La Importancia De Orar El Santo Rosario
El Santo Rosario es un itinerario de anuncio y de profundización en el misterio de Cristo, una oración mariana que centra nuestra mente y corazón en Jesucristo. Es un momento especial para estar con María; y con Ella, dejarnos conducir a Jesús.
"Donde dos o tres estén reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos" (Mt 18:20).
Meditar con el Santo Rosario significa poner nuestros afanes en los corazones misericordiosos de Cristo y de su Madre. En familia, fortalece la unidad de la vida familiar. Cuando oramos el Santo Rosario previo a la celebración litúrgica, nos prepara mejor para la Eucaristía.
La palabra Rosario significa “Corona de Rosas”, es la rosa de todas las devociones y es la más importante. Su forma física es un contador que facilita recitarlo en orden.
¿Cuál Es El Origen Del Santo Rosario?
Aproximadamente en el año 800, surge el rezo del Santo Rosario, cuando se creó el salterio de los laicos. Los monjes rezaban los 150 salmos, pero como la mayoría de los laicos no sabían leer, se les enseñó a rezar 150 Padrenuestros. Después se formaron otros tres salterios que incluían 150 Avemarías, 150 alabanzas en honor a Jesús y 150 alabanzas en honor a María.
En 1208, la Virgen María Madre de Dios se le apareció a Santo Domingo de Guzmán, sacerdote español, en una capilla dedicada a la Santísima Virgen del convento francés de Prouille, y con el rosario en mano le enseñó a recitarlo como un arma contra los enemigos de la fe. La Virgen le pide que propague esta devoción por el mundo, convirtiendo pecadores y obteniendo abundantes gracias.
Con el paso de los años, se modificó y perfeccionó hasta el 2002 cuando el Papa San Juan Pablo ll introdujo los misterios luminosos.
La Virgen del Santo Rosario es ¡Auxilio de los Cristianos! porque ha salvado a los católicos en muchas ocasiones de guerra y violencia contra la fe. Cuando el mundo está en crisis y nuestras fuerzas humanas no bastan, la victoria vendrá nuevamente de la mano de Virgen María.
¿Sobre La Plegaria Del Santo Rosario?
La oración del Santo Rosario tiene como una de sus características el ritmo sereno y pausado. Con la práctica, se va favoreciendo la meditación y resulta sumamente beneficiosa, especialmente en este tiempo en que no pocas veces nos vemos inmersos en diversas actividades. Esta sencilla plegaria nos introduce en un ritmo meditativo que nos pone en comunión vital con Jesús a través del corazón de su Madre.
En cada Padrenuestro rezamos con las palabras que Jesús mismos nos enseñó y por acción del Espíritu Santo nos unimos a la voz del mismo Hijo.
El Avemaría consta de dos partes, la primera Dios te salve, es el saludo del Ángel Gabriel en la Anunciación e Isabel, y la segunda Santa María, promulgada por el Papa san Pío V en el siglo XVI; en cada Avemaría reconocemos el milagro más grande de la historia: la Encarnación del Verbo y hacemos nuestra confesión de fe como Isabel: "Bendita tú y bendito el fruto de tu vientre, Jesús".
Al término de cada decena damos gloria al Padre a través del Hijo en comunión con el Espíritu Santo.
Los misterios gozosos, luminosos, dolorosos y gloriosos que vamos anunciando antes de cada denario nos permiten ir meditando en acontecimientos de la vida del Reconciliador de la mano de la Madre de Nuestro Señor Jesucristo.
Podemos incluir en sus decenas, los hechos de nuestra vida, la de nuestra familia, nuestra nación, la Iglesia o la humanidad.
La repetición ayuda al estado meditativo porque silencia la mente, por lo que esta plegaria resulta muy adecuada para la interiorización y el recogimiento. Distraerse o perder la concentración no invalida nuestra oración; debemos retomar el ritmo y reafirmar el propósito de ofrecer esta práctica espiritual como un acto concreto de amor a María.
Medios Dispuestos Por La Parroquia Santa María Del Camino Para Rezar Con Mayor Fruto Espiritual El Santo Rosario.
| Rosario diario en el Templo. | Rosario virtual, un martes al mes. |
Imagen  | Imagen  |
¿Cuáles Son Los Beneficios De Rezar El Santo Rosario?
La Virgen María Puede Ayudarnos A Conocer Mejor A Su Hijo Jesucristo.
Cuando el ángel se apareció ante María y le dijo que concebiría y daría a luz al Hijo de Dios, ella respondió: “He aquí la sierva del Señor”. Hágase conmigo según tu palabra” (Lucas 1, 38). Su “sí” a seguir la voluntad de Dios, fue un momento indispensable en la historia de la salvación del mundo. María estuvo presente durante toda la vida de Jesús, incluso en su crucifixión. Al rezar el rosario, podemos contemplar cómo servir a Dios siguiendo su ejemplo.
La devoción al Santo Rosario es una señal manifiesta de predestinación de gloria, con la posibilidad de obtener indulgencias plenarias.
Las 15 Promesas de la Virgen María.
“Aquellos que recen con enorme fe el Rosario recibirán gracias especiales”.
“Prometo mi protección y las gracias más grandes, para todos los que con devoción recen el Rosario”.
El Rosario es un arma poderosa para no ir al infierno, destruirá los vicios, disminuirá los pecados, y nos defenderá de las herejías.
Se otorgará la virtud y las buenas obras abundarán, se otorgará la piedad de Dios para las almas, se rescatará a los corazones de la gente de su amor terrenal y vanidades, y los elevará en su deseo por las cosas eternas. Las mismas almas se santificarán por este medio.
“El alma que se encomiende a mí en el Rosario no perecerá”.
Quien rece el Rosario devotamente y lleve los misterios como testimonio de vida no conocerá la desdicha. Dios no lo castigará en su justicia, no tendrá una muerte violenta, y si es justo, permanecerá en la gracia de Dios y tendrá la recompensa de la vida eterna.
Aquel que sea verdadero devoto del Rosario, no perecerá sin los Sagrados Sacramentos.
Aquellos que recen con mucha fe el Santo Rosario en vida y en la hora de su muerte, encontrarán la luz de Dios y la plenitud de su gracia, en la hora de la muerte participarán en el paraíso por los méritos de los Santos.
“Libraré del purgatorio a quienes recen el Rosario devotamente”.
Los niños devotos al Rosario merecerán un alto grado de Gloria en el cielo.
“Obtendrán todo lo que me pidan mediante el Rosario”.
“Aquellos que propaguen mi Rosario serán asistidos por mí en sus necesidades”.
“Mi hijo me ha concedido que todo aquel que se encomiende a mí al rezar el Rosario, tendrá como intercesores a toda la corte celestial en vida y a la hora de la muerte”.
“Son mis niños aquellos que recitan el Rosario, y hermanos y hermanas de mi único hijo, Jesucristo”.
“La devoción a mi Rosario es una gran señal de profecía”.
"Si deseáis paz en vuestros corazones y en vuestros hogares, rezad diariamente el Santo Rosario". San Pio X
